Las clases son prácticas y teóricas. Aprendemos como tocar el instrumento con la postura corporal correcta para el charango. A medida que la conciencia y el control muscular aumenta trabajamos sobre la búsqueda de un mejor sonido y un fraseo musical. Paralelamente desarrollamos conceptos de música útiles y necesarios cuando tocamos un instrumento. Estos son una herramienta fundamental a la hora de querer componer, improvisar o interpretar una obra.
Con la práctica y, a medida que progresamos, la idea es abarcar la música que el alumno quiere tocar, incorporando canciones de acuerdo a las habilidades que va desarrollando con el instrumento.